jueves, 3 de abril de 2008

SEPULCRO DE AMOR



Soledad, añorada soledad
que vistes esta tristeza
cuando el recuerdo se implanta en la sangre
y la musa se ausenta abatida
del diario de mis quimeras.

Soledad, flor de fríos inviernos
ésos que aún en gélida melancolía abrazando mi lecho
forjan en el laberinto de mis sueños
un libro que permaneció en el olvido.

¿En donde murieron mis versos?
Si eran nacidos del alma
si se escribieron inagotablemente en la vida
de todos los tiempos.

¿Y mi nombre?
En sepulcro sombrío y abandonado
silenciosamente en tus labios ha sido mutilado
para que ya no exista
para que ya mis huellas no inquieten soledades
ni agrieten más distancias
y sanen para siempre las heridas.

Si duele, corazón
lastima tantos orgullos
y araña a este destino que se escribió un día
en tantas melancolías.

Pero si el tiempo de tus ojos me borraran
y mi nombre de tu voz lo desterraras

No, ya nada sentiré
cuando de mis ojos una lágrima resbale
ni dolerá mi cuerpo al lastimarme.

Culpable será solo el destino
que me dejado en una losa
despiadadamente
-en el olvido-


Alma Cervantes

No hay comentarios:

Seguidores

Archivo del blog